¿Cuáles son los diferentes tipos de eczema?
Se llama dermatosis pruriginosa, y su apariencia y extensión en la piel puede variar de un caso a otro. Cabe señalar que esta enfermedad de la piel no es contagiosa. Por otro lado, es recurrente. El eccema suele aparecer muy temprano, especialmente en los bebés. Sin embargo, también puede aparecer en la edad adulta. Las causas del eczema son muchas, aunque algunas son desconocidas. La mayoría de las veces, esta inflamación de la piel se asocia con una reacción alérgica o asma.
Entre los diferentes tipos de eccema se encuentra el eccema atópico o la dermatitis atópica. Esta es la forma más común de eczema y es crónica. El eccema atópico se asocia con una alergia hereditaria o genética. Por lo tanto, se desencadena por el contacto con el alérgeno, a menudo un elemento volátil como el polvo, el ácaro del polvo y el polen, o un alérgeno alimenticio. Entonces, el eccema de contacto se produce cuando una persona entra en contacto con algo que puede o no ser un alérgeno. Se trata principalmente de productos químicos o drogas.
Entonces, el eccema de sensibilización interna se produce como resultado de una infección con una bacteria o un virus. Por lo tanto, es una reacción de la piel del cuerpo. Afortunadamente, existe un tratamiento natural de eczema para todas estas formas de inflamación dermatológica.
El caso especial del eczema en la mano
Estoy seguro de que te has dado cuenta. La mayoría de la gente sólo tiene eczema en sus miembros. Los casos más comunes son el eccema de las manos o el eccema dishidrosisforme. Esta inflamación de la dermatitis se produce en los lados de los dedos y la palma de la mano. La deshidratación suele ir acompañada de enrojecimiento, descamación e incluso ampollas.
Sin embargo, la mano puede verse afectada por formas comunes de eccema. Por ejemplo, el eccema de contacto puede detectarse como resultado de una alergia. Luego está la dermatitis atópica, caracterizada por la piel seca y las grietas en las puntas de los dedos. Finalmente, hay un irritante eczema de contacto. Como su nombre lo indica, este eczema causa irritación causada por condiciones climáticas extremas (calor o frío), productos químicos, fricción o plantas irritantes.
El eccema de la mano es bastante peculiar porque esta extremidad es más susceptible a los alérgenos. Afecta particularmente a las amas de casa, los trabajadores manuales y los agricultores. Las manos se debilitan y se vuelven más sensibles al contacto con productos del hogar, fertilizantes, pesticidas y sustancias alergénicas. Además, el eccema de las manos puede ser desencadenado por enfermedades alérgicas como el asma, la rinitis y la conjuntivitis. Por último, hay causas poco conocidas como el estrés, la sudoración excesiva y la exposición al sol. En cualquier caso, siempre hay un tratamiento natural para el eccema de las manos.
¿Cómo se puede prevenir el eczema?
Si tiene una predisposición a esta enfermedad dermatológica, debe tomar todas las precauciones necesarias para evitar que se repita. La piel eczematosa siempre está muy seca y a veces incluso agrietada. El primer paso es luchar contra esta piel seca. Evite desnudar la piel excesivamente con jabón y otros limpiadores irritantes. Lavar la piel con agua tibia y productos especiales para la piel seca.
Evite el contacto prolongado con el agua limitando el baño a un máximo de 15 minutos. Evite las actividades acuáticas, especialmente en las piscinas donde el agua es clorada.
Aplique la crema hidratante generosamente sobre la piel al menos una vez al día. Elija productos naturales como el aceite de oliva con sus propiedades antiinflamatorias. Reduce el enrojecimiento y la irritación neutralizando los radicales libres. El aceite de coco también es excelente para tratar la piel seca. Nutre e hidrata la piel en profundidad. También es un antiséptico y antibacteriano muy poderoso.
El aceite de almendra dulce es rico en vitamina E para nutrir la piel, restaurar la elasticidad y reparar los daños superficiales como las escamas. Cuando se acentúan los daños causados por el eccema de la mano, el pie o la cara, se pueden aliviar las lesiones con un paquete fresco y húmedo. También alivia la picazón.
Alimentos que hay que evitar y favorecer
A veces el eccema es promovido por ciertos alimentos. Tienes que prohibirlos de tu dieta. Evite los productos altamente procesados con muchos aditivos. Elimina los productos con grasas saturadas como los fiambres, la mantequilla, la crema, el queso y las galletas. Reducir el consumo de leche de vaca, nueces y huevos. Haz lo mismo con los cereales ricos en gluten como la cebada, el centeno y el trigo. No utilice aceites ricos en omega 6, como los de palma, maní, girasol y maíz. Evite comer carne roja, especialmente en tiempos de crisis y cuando tenga sarpullidos. Excluya el café y el azúcar de su dieta. Finalmente, no comas demasiados cítricos. Todos estos alimentos promueven la irritación e inflamación de la piel.
Por otro lado, elija alimentos que nutran y suavicen la piel para prevenir o calmar la irritación. Come pescado azul rico en omega-3, dos o tres veces por semana, como arenques, salmón, anchoas y sardinas. El hígado de bacalao también es excelente por sus ácidos grasos con propiedades antiinflamatorias. Mientras que los productos lácteos generalmente no son buenos para el eccema, el yogur fermentado casero contiene buenas bacterias para estimular el sistema inmunológico. También puedes comer probióticos para beneficiarte de estas bacterias antialérgicas.
Formas naturales de tratar el eczema
Generalmente, el eccema se trata por vía oral o dérmica con corticoides. Se utilizan principalmente como pomada para aplicar a las lesiones. Los antihistamínicos son necesarios para el eccema alérgico. Sin embargo, es mejor tratar esta condición de la piel de una manera natural. Puedes usar la aromaterapia, ya que los aceites esenciales hacen maravillas.
El aceite de manzanilla es un antiinflamatorio. El aceite de menta es tanto un anestésico como un analgésico. Por último, el aceite del árbol del té es un antiséptico y un agente curativo. También se puede utilizar la fototerapia. Este tratamiento calma la inflamación de la piel, elimina las bacterias de la piel y reduce el picor. Finalmente, la balneoterapia puede ayudarte tomando un baño con sal del Mar Muerto.